Lanzas tu primer producto digital con ilusión, después de invertir tiempo, esfuerzo y quizás un poco de dinero. Lo compartes con entusiasmo, lo promocionas en tus redes, tal vez armas una pequeña campaña… y luego nada. Cero ventas. O una, con suerte. Esa sensación de fracaso es más común de lo que crees. No significa que tu producto sea malo. Tampoco que no sirvas para esto. Solo quiere decir que hay algo que ajustar. Y eso es completamente normal. El primer paso es respirar. Literalmente. Detener la frustración y mirar…
Leer más